Desde tiempos antiguos, el yoga ha sido una fuente de equilibrio y armonía para quienes lo practican. No es solo una serie de posturas o ejercicios de respiración, sino una forma de vida que conecta el cuerpo, la mente y el espíritu. A medida que el ritmo acelerado del mundo moderno nos abruma con estrés y tensiones, el yoga se convierte en un refugio donde podemos encontrar equilibrio, paz y fortaleza.
Descubriendo los beneficios del yoga
Imagínate despertando por la mañana, estirando suavemente tu cuerpo mientras inhalas profundamente. Cada movimiento fluye con tu respiración, liberando la tensión acumulada en los músculos y despejando tu mente. Con cada práctica, sientes cómo el estrés se desvanece y la energía positiva fluye a través de ti.
El yoga no solo relaja; también fortalece. A medida que te sumerges en las posturas, mejoras tu flexibilidad, tu movilidad y tu equilibrio. Además, estudios han demostrado que el yoga puede reforzar el sistema inmunológico, ayudándote a enfrentar el día con mayor vitalidad. Y lo mejor de todo, tu capacidad de concentración se agudiza, permitiéndote abordar tus responsabilidades con una mente más clara y serena.
Para profundizar aún más en esta práctica, muchos encuentran en los aceites esenciales el complemento perfecto. Sus fragancias naturales estimulan los sentidos y amplifican los beneficios del yoga. Imagina el aroma calmante de la lavanda envolviéndote mientras te sumerges en una postura de descanso, o la frescura revitalizante de la menta ayudándote a despertar cada célula de tu cuerpo en un estiramiento matutino.
Posturas en armonía con algunos aceites esenciales:
Balasana (postura del niño) con Lavanda
Al inclinarte hacia adelante en esta postura de descanso, sientes cómo todo el peso del día se disuelve. Unas gotas de lavanda en tus muñecas o en un difusor te envuelven en una sensación de tranquilidad profunda.
Adho Mukha Svanasana (perro boca abajo) con Menta
Tu cuerpo se estira, la circulación se activa y la mente se despeja. Inhalar el aroma de la menta intensifica la sensación de frescura y revitalización, ayudándote a afrontar el día con energía renovada.
Virabhadrasana II (guerrero II) con Incienso
Con los pies firmes en la tierra y los brazos extendidos, sientes la fortaleza dentro de ti. El incienso, con su aroma profundo y terroso, refuerza tu conexión con el momento presente y con tu propia determinación.
Savasana (postura de la relajación y descanso) con Manzanilla o Sándalo
Al final de la práctica, te entregas al descanso en Savasana. Unas gotas de manzanilla o sándalo te guían hacia una relajación aún más profunda, permitiéndote absorber por completo los beneficios del yoga.
El arte de la conexión
Cada sesión de yoga es una oportunidad para reconectar contigo mismo. Con el apoyo de los aceites esenciales, la práctica se transforma en un ritual aún más enriquecedor. En cada inhalación, en cada postura, descubres un espacio de paz dentro de ti, donde el bienestar fluye libremente. Prueba estas combinaciones y permite que el yoga y la aromaterapia sean tus aliados en el camino hacia una vida más armoniosa.
Hace unos años que practico Yoga Iyengar y doy fe que hacerlo ha significado descubrir las enormes posibilidades de mi cuerpo, para entenderlo y sobre todo aceptarlo.
Si quieren vivir esta experiencia y darse la oportunidad de darle a su cuerpo salud y bienestar, los animo a tomar algunas clases de yoga. A quienes viven en Lima los invito a hacerlo con una de las mejores maestras, a quien agradezco mucho todo lo que me ha brindado con generosidad a lo largo de los años de amistad, ¡gracias Lili Zeni!.
Si desean probar sus clases, aquí les dejo su contacto: Lili Zeni – Maestra de Yoga (Lima) – Cel +51 992 381 008.
Portada: Práctica de yoga con Lili Zeni. Foto: Andrés Espíndola
